7 Seres Mitológicos de la Amazonia Peruana Más Tenebrosos

La Amazonia con su exuberante vegetación, encierra un sin número de misterios y peligros en la profundidad de sus bosques. Para los habitantes de este inmenso manto de verdor no hay secretos ocultos. En este mundo además de la gran variedad de animales salvajes, existen también mitos y leyendas. Los mitos y leyendas forman parte de la cosmovisión de las etnias amazónicas, allí, basta que alguien toque el tema, para que los mayores, hombres o mujeres, narren sobre animales fantásticos, apariciones, brujería, magia y encantamientos que los presentes escuchan con avidez y respeto.

1. El bufeo colorado

En el Amazonas el delfín rosado es conocido como Bufeo Colorado, es así como la gente lo distingue de los delfines grises.
La leyenda cuenta de que el bufeo, por ser o duende “encantado”, puede adoptar la apariencia de un hombre “gringo” al que le gustan las mujeres jóvenes. Es con esa apariencia que suele presentarse a la fiesta en la que se encuentra la chica elegida por él. Como viajero de paso, baila y enamora a la muchacha, invita a beber a todos los participantes y es de esa forma como se gana la simpatía general. Pero este ser no come ni mucho menos bebe licor, porque si se embriaga, se rompería el encantamiento y se descubriría la verdadera forma de este.
Cuando la muchacha se convierte en la enamorada del bufeo, él la colma de regalos y atenciones. Suele visitarla de manera frecuente por las noches y se marcha antes del amanecer. Al poco tiempo, la mujer enamorada empieza a mostrar una conducta extraña, pues ésta desea permanecer todo el tiempo junto al río y si esta situación no es notada a tiempo por sus familiares y no recibe la atención de un chamán o curandero, puede terminar desapareciendo de la faz de la tierra, ya que en su deseo de estar siempre junto al “bufeo”, la obligará a arrojarse al río.

2. El runapuma o yanapuma

Antiguamente, existían brujos que realizaban pactos con los demonios de la selva. Era bastante el poderío que tenían para hacer el mal y sus afanes de tener cada vez más poder llegaban al estado de tener la necesidad de beber sangre y recurrir a la antropofagia.
Estos brujos habitaban en lo más apartado de la Amazonia y casi siempre solos. Ellos tenían la habilidad  de transformarse en Runapuma, cuando sentían necesidad de alimentarse. Realizaban invocaciones por medio de “cantos mágicos de poder”, pidiendo fuerza a los demonios de la Amazonia y entonces se convertían en hermosos jaguares negros con un gran apetito. De esta manera, atacaban a sus víctimas, sin importarles que estuvieran armadas o en compañía. Eran incapaces de tener temor, porque se sentían protegidos. Una vez satisfecho su apetito, volvían a convertirse en hombres casi normales.
Por esta razón se cree que los jaguares totalmente negros o yanapumas son mensajeros del más allá o poderosos brujos capaces de tomar forma humana.

3. La runamula

En la selva se dice que cuando una mujer casada o comprometida, nativa o mestiza, seducía o era conquistada por un misionero; por un raro sortilegio del destino, se convertía en un duende con cuerpo de mula, cabeza y pecho de mujer, que vaga en las noche de luna llena asustando a los lugareños de los pueblos y caseríos, con sus relinchos tenebrosos y el ruido producido por sus cascos, al galopar sin rumbo alguno. Es así como la gente sabía entonces que había allí una mujer que mantenía relaciones prohibidas.
Los más valientes, perseguían al animal encantado para ver en qué casa se introducía o hacia donde se dirigía cuando terminaba el encantamiento. La infiel descubierta, tenía que ser llevada a un curandero, y mediante baños y sesiones de ayahuasca, era liberada del encantamiento.


4. El yacuruna

El Yacuruna es el espíritu mágico más importante de la selva baja. Manda sobre todos los animales y seres del agua, suele ser invocado por los chamanes y curanderos, en las sesiones de ayahuasca, tanto para hacer el bien como para hacer el mal.
El Yacuruna es parecido al dios Poseidón de mitología griega. Se dice que él viaja por los ríos y los lagos de la Amazonía por la noche montando un enorme cocodrilo negro, adornado con una boa como un collar. Él tiene el poder para convertirse en humano dando la apariencia de ser un hombre guapo. Usando poderes mágicos de seducción, a menudo engaña a las muchachas inocentes, haciéndolas enamorarse que caigan rendidas a sus pies. Una vez que han caído a sus hechizos, él traslada a las chicas a su hogar en las profundidades del río, para nunca más verse otra vez por el mundo exterior.
Según la leyenda, el Yacuruna puede comunicarse con animales acuáticos y utiliza sus poderes para dominarlos.

5. La sachamama

La sachamama según las leyendas amazónicas, es una serpiente gigantesca y solitaria, que pese a su tamaño, le resulta fácil esconderse en los pantanos de la selva y que algunos afirman que este ser es la reencarnación del espíritu del río. Llegará un momento en su vida donde su peso incrementará de tal manera, que ya no podrá reptar. Entonces buscará un lugar suficientemente amplio donde vivir permanentemente.
Se comenta que presenta poderes, como la capacidad de hipnotizar a su víctima, de tal manera que esta ingrese voluntariamente a su boca; dicha habilidad, ha hecho que este asombroso animal sea más estático, y no tenga la necesidad de buscar presas, ya que estas llegan hacia ella atraídas por sus encantos.
Cualquier animal u hombre que por ignorancia o descuido pasa cerca de ella, apenas distingue la cabeza de la alimaña. Pero pobre el incauto ya que correrá una triste peripecia, estará atrapado por su poderosa mandíbula, lo tritura y se lo tragará. Luego de saciar su hambre, le espera un largo sueño. Los que han sobrevivido a ella, han gozado de mucha suerte, porque una vez que la Sachamama ve a su presa, se empecina con ella hasta capturarla.

6. El tunche

El tunche, es un ser que vaga por las noches oscuras de la selva, como alma en pena y se cuenta que antes fue un hombre atormentado; unos dicen que es un ave, otros que es un brujo o un espíritu que goza aterrorizando a la gente; sin embargo, no es ni bueno ni malo, es en sí el balance entre ambas cosas que refleja el verdadero ser de las personas con las que se encuentra. Es decir, si una persona es mala, el tunche le hará pagar por el daño que ha hecho y si la persona es buena solo le hará recordar que no debe temer de sí mismo.
Nadie sabe exactamente como es físicamente este ser, aunque hay quienes indican que sus pies en forma de patas de cabra, son la única parte de su cuerpo que nunca puede ocultar pese a sus trasformaciones y los que le temen es porque han vivido los efectos de su venganza. Se le puede reconocer cuando, en plena oscuridad, lanza un silbido desgarrador, y a medida que se va acercando a la persona, éste va aumentando su volumen, así que por más que su víctima corra, sentirá su presencia cada vez más cerca y no podrá escapar. Cuando el Tunche lanza su silbido con insistencia sobre el techo de una casa o por los alrededores de un pueblo, se cree que es significado de mala suerte, enfermedad y muerte.
Algunas de las pocas personas que han logrado escapar del ‘Tunche’ han perdido la razón, así lo aseguran quienes creen en esta leyenda pavorosa. Aquellos que aseguran haber sobrevivido de milagro, narran que el ‘Tunche’ cobra vida bajo la imagen de algún conocido de la víctima.
Burlarse o insultar, al tunche, puede costarle caro al atrevido, ya que lo hará enfurecer y entonces atacará silbando, lo perseguirá tanto que hasta el más valiente entrará en pánico, que puede llevarlo a la locura o a la muerte.
El destino de sus víctimas es otro misterio que envuelve esta historia selvática. No se sabe si el ‘Tunche’ los abandona a su suerte y mueren de hambre, o devora a sus víctimas.

7. El chullachaqui

Los habitantes de la selva cuentan que esta extraña criatura siempre adopta la figura o la forma de una persona amiga conocida del pueblo, para engañar a la que va a ser su próxima víctima y hacerla perder en la espesura de la selva. El Chullachaqui no vuelve aparecer en el mundo real, y su víctima pasa a formar parte de su legión de duendes, de la cual es el jefe absoluto. En lo profundo de la selva posee chacras donde cultiva sus alimentos, que resultan ser plantas venenosas similares a la papa, la yuca y otros vegetales.
Muchos pobladores aseguran que en muchas oportunidades han visto las huellas o pisadas desiguales impresos en el barro, mientras otros dicen que es un demonio que cuida la selva para que no penetren en ella. Si vamos a la selva y hallamos a un familiar u otro ser querido, casualmente y sin razón alguna, debemos ser precavidos. Porque, seguramente, el Chullachaqui ha tomado esa forma para perdernos en la jungla; la única forma de escapar de su “encantamiento”, es mirar sus pies deformes. Consecuentemente, él tratará de esconderlos para que no vean que tiene uno de cabra. Al ser descubierto, el duende escapará a la selva. Se cuenta también que puede tener su pie en forma de pata de otro animal, o incluso un pie humano vuelto hacia atrás.

Este fantástico mundo de los mitos y leyendas, es un tema apasionante. ¿Qué les pareció la lista? ¿Agregarían a algún otro ser? Déjame tu comentario. Nos vemos en un próximo post con más de este y muchos otros temas.

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